Ceremonia de Apertura en Tokyo

Especial para CLARIDAD

 

Escribir en medio de unos Juegos Olímpicos no es fácil, hay tantos temas para escoger, tanto deportivos, como no deportivos. En mi lista está hablar de la participación de los y las atletas que representan a Puerto Rico; el debut de varios deportes como el “skateboarding” y el surfing; el debate que ha surgido en cuanto a la vestimenta de las atletas y cómo muchas están desafiando los estereotipos de género cambiando la ropa que usan en la competencia; cómo en apenas varios días de competencia ha habido varios “tablazos” de victorias inesperadas, entre otros. Pero todo esto será mejor luego de finalizados los Juegos en los cuales se podrá tener una mejor perspectiva. A este punto me gustaría hablar de la Ceremonia de Apertura.

Desde niña me gustó la geografía. Pasaba largas horas jugando con mi padre aprendiéndome las capitales de los diversos países del mundo, las banderas y jugábamos a darle la vuelta al globo con los ojos cerrados y donde paraba mi dedito, hacíamos alguna trivia del país. Cada cuatro años-en este caso-cinco, me divierto muchísimo viendo la Ceremonia de Apertura de los Juegos Olímpicos, pues además de disfrutar el espectáculo artístico y cultural que presenta el país anfitrión, tomo el desfile de naciones como una clase de geografía. Siempre hay algún país nuevo, y es interesante ver cómo llegó ahí, sin contar las microhistorias de los no países, como en este caso la delegación de refugiados y entender por qué Rusia no va como tal sino como ROC –Comité Olímpico de Rusia.

El viernes 23 de julio cuando se inauguraron los Juegos Olímpicos en Tokyo, 206 delegaciones desfilaron, digo delegaciones y no países, pues está el caso de la delegación de refugiados. Hace 21 años, cuando se inauguraron los Juegos Olímpicos en Sydney, Australia, hice un escrito comparando el listado de países miembros de las Naciones Unidas con el listado de países con un Comité Nacional Olímpico (CON), uno de los requisitos para participar en los Juegos Olímpicos. En ese entonces no solo comparé ambas listas sino que expliqué el estatus político y la historia olímpica de cada una de las naciones que, al igual que Puerto Rico, tenían soberanía deportiva pero no política. Hoy, 21 años después, todavía es fascinante; aún Puerto Rico, Palestina, algunas de las islas del Caribe y Pacífico no tienen el mismo estatus político en la esfera internacional que las demás naciones del mundo, y mantienen su representación olímpica. Es interesante que no todos estos casos son como el de Puerto Rico, el cual tiene representación olímpica y también en todos los demás eventos deportivos internacionales. El caso de Gran Bretaña, por ejemplo, tiene representación olímpica como una sola nación, pero en el fútbol internacional está dividido, es decir, Escocia, Inglaterra y Gales tienen representación individual en FIFA.

Este año mientras veía la ceremonia inaugural iba anotando los países que no conocía, irrespectivamente de si estaban debutando o no en los Juegos.

Eswatini

Esta fue la primera vez que escuché este nombre y me sorprendí y lo anoté. Cuando busqué información me di cuenta que es lo que era antes Swazilandia, un país pequeño entre Suráfrica y Mozambique. Ha tenido representación olímpica desde el 1972 en Munich y nunca ha ganado medallas. Esta nación con una monarquía absoluta está representada en Tokyo con 4 atletas.

Comoros

También conocidas como las islas de Comoro y cuyo nombre oficial es Unión de Comoro, es un archipiélago localizado en el Océano Índico, comparte fronteras marítimas con Madagascar, Mayotte, Tanzania, Mozambique y Seychelles. Esta república federal tiene a un presidente como jefe de estado y combina un sistema legal basado en la ley islámica, y un código legal heredado de Francia. Miembro de las Naciones Unidas desde 1975, aunque tiene la peculiaridad que los ciudadanos de una de las islas, Mayotte, decidieron mantenerse ciudadanos franceses y ser parte de Francia. Comoros tiene participación olímpica desde 1996 en Atlanta y está representado en Tokyo por tres atletas. Aún no ha ganado una medalla.

Djibouti

Este pequeño país en el noreste de África es el de menor población en el continente, cerca de un millón de habitantes. Esta nación multi étnica, con una mayoría que profesa el Islam. Su independencia de Francia se logró a través de un referéndum en el 1977, el tercero luego de que los primeros dos perdiera la opción de la independencia. Su participación olímpica comenzó en Los Ángeles en el 1984. Tienen una medalla olímpica, un bronce del maratonista Hussein Ahmed Salah en el 1988. En Tokyo están representados por cuatro atletas.

Nauru

Oficialmente la República de Nauru es una pequeña isla en Oceanía. El tercer país más pequeño del mundo ha sido invadido y conquistado por un sinnúmero de naciones, como Alemania, Japón, Australia y obtuvo su independencia en el 1968 y fue admitida a las Naciones Unidas en el 1999. Su debut olímpico fue en Atlanta 1996 y hasta el 2012 solo había sido representada por atletas de levantamiento de peso. En Tokyo tiene dos atletas.

Vanuatu

 Este archipiélago de unas 80 islas está localizado en el Océano Pacífico. A finales del siglo 19 tanto Francia como Gran Bretaña la conquistaron y compartieron su dominio. Vanuatu obtuvo su independencia en el 1980. En el 1987 creó su Comité Olímpico Nacional y debutó en el 1988 en Seúl. En Tokyo está representada por 3 atletas.

 

Tuvalu

Antes conocidas como las Islas Ellice, Tuvalu es una isla en la región polinesia del Océano Pacífico, localizadas entre Hawaii y Australia. Luego de un referéndum en el 1974, las Islas Ellice y Gilbert, ambas colonias británicas, decidieron su futuro y se convirtieron en Tuvalu y Kiribati, respectivamente. Tuvalu se convirtió en un estado soberano dentro de la Mancomunidad Británica y en septiembre del 2000 se convirtió en el miembro 187 de las Naciones Unidas. Tuvo su debut olímpico en Beijing en el 2008 y tiene dos atletas en Tokyo. Curiosamente cuando escribí ese artículo en el 2000, Tuvalu y Kiribati eran, junto con las Islas Marshalls, los países que tenían representación en las Naciones Unidas y no en los Juegos Olímpicos.

 

Sin duda los Juegos Olímpicos son una oportunidad para aprender más sobre otros países y culturas. En las próximas semanas seguiré escribiendo sobre otros temas olímpicos.

 

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