Cuando el boxeo cumple

 

Especial para CLARIDAD

Este mes de octubre se cumplen 18 años desde que escribí mi primer artículo para el periódico CLARIDAD. Tras escribir mi primer artículo sobre tenis, mis próximos diez fueron sobre boxeo. No se planeó así, simplemente para aquella época mientras pasaba mi periodo de prueba, el compañero Elliott Castro me aconsejó que comentara o escribiera de un deporte que conociera y tuviera accesibilidad para cubrir. Para esa época la compañía PR Best Boxing Promotions estaba comenzando una serie de boxeo caliente en el coliseo Pedrín Zorilla que por la calidad del evento me hicieron enamorarme del boxeo.

Uno de esos escritos, no recuerdo cual, me llevó a que fuera contratado como analista boxístico del programa deportivo de Mayagüez “Mesa Deportiva” lo que me obligó aún mas a empaparme de ese deporte.

Esta introducción siento que es necesaria para hablar en detalle de lo que fue una cartelera extraordinaria el pasado sábado que vio al británico Tyson Fury retener su campeonato de peso completo en una extraordinaria batalla de peso completo contra el estadounidense Detonay Wilder, en lo que es probablemente la mejor pelea de ese peso que he visto desde que cubro deportes.

Desgraciadamente recientemente las malas decisiones en las peleas de jueces que someten tarjetas de cosas que contrastan con lo ocurrido en el ring, el favoritismo craso hacia los peleadores de algunos promotores y la impunidad que no tiene consecuencias, ha hecho que la credibilidad de este deporte vaya en picada y que cada día más se hable de la corrupción en el mismo más que de las peleas.

Fue bueno ver eso cambiar aunque sea por una semana donde los protagonistas fueron los boxeadores y no las cosas alrededor de ellos.

Fury demostró que es el mejor peso completo

Independientemente de que se trate de una época donde los pesos completos no son los mejores del mundo eso no debe desmerecer lo que ha hecho Fury tras acabar con el reinado de Wladimir Klitscho en 2015. El británico enfrentó una seria batalla contra las drogas, alcoholismo y depresión que lo mantuvo fuera del ring hasta el 2018 y en su segundo combate de regreso decidió enfrentar a Wilder. En esa ocasión fue derribado en los asaltos tres y doce, pero en mi opinión mereció ganar la decisión en una pelea que fue decretado un controversial empate. Lo que llamó la atención de esa pelea es que Wilder, que estaba invicto para ese entonces, tenía una reputación de que cuando te pegaba uno no se levantaba pues había noqueado 37 de sus 38 oponentes hasta ese momento. Una segunda pelea vio a Fury dominar abiertamente y noquearlo en siete asaltos por lo que no había ninguna indicación de que la del sábado fuese ser un clásico. Al Fury tumbarlo temprano en el tercero parecía otra victoria cómoda pero Wilder de alguna manera reaccionó y lo envió a la lona en dos ocasiones (de las que nuevamente Fury se levantó) y lo fue magullando asalto por asalto y poco a poco lo fue ablandando al punto que, aunque Wilder apenas se podía sostener el corazón mostrado para hacer la pelea competitiva hasta el 11 y hacer un gran combate, le devolvió mucha de la reputación que había perdido al ser un mal perdedor después del segundo combate.

Noche mixta para los boricuas

En lo que representó un ascenso significativo en el nivel de calidad que han enfrentado en su carrera, el boricua Orlando González fue derrotado frente al cubano Robeisi Ramírez. Mientras que Edgar Berlanga mantuvo su récord invicto de 18-0 no sin antes pasar un susto mayúsculo al ser enviado a la lona por primera vez por el argentino Esteban Coceres. Creo que ambos deben mirar seriamente sus carreras, en el caso de Orlando creo que si hubiera estado un poco más activo hubiera tenido una oportunidad real.

Por su parte Berlanga tiene todos los atributos pero tiene que pulirlos. En mi opinión tiene que trabajar mucho con sus movimientos laterales y encontrar la manera de cortar el ring sin perseguir a su oponente, lo que te gasta energía y te hace vulnerable a golpes como el de Coceres.

Fue sin duda una gran noche de boxeo y cuando ésta cumple con las expectativas es difícil de superar.

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