Cuba apuesta por el turismo “inclusivo” con su primer hotel orientado a la comunidad LGBTTQ

Corresponsal de CLARIDAD

 

Ciego de Ávila, Cuba –Después de más de un año de pandemia, Cuba ha vuelto a recibir turistas internacionales y poco a poco la industria hotelera vuelve a la normalidad, por lo que el país refuerza sus atractivos turísticos con nuevas propuestas que incluyen, entre otras, espacios de inclusión especialmente dirigidos a la comunidad LGBTTQ.

El pasado 1 de noviembre reabrió sus puertas el Gran Muthu Rainbow Hotel, el primer hotel de Cuba y del Caribe particularmente enfocado al sector LGBTTQ, históricamente carente de espacios inclusivos como este tanto en la isla como el resto de países de la región.

Ubicado en el sistema de cayos Jardines del Rey, al Norte de la céntrica provincia de Ciego de Ávila, el complejo hotelero, pensado sólo para adultos, fue inaugurado en 2019. A pocos meses de su apertura, sin embargo, se vio forzado a cesar operaciones debido a la pandemia de la Covid-19, que frenó las operaciones turísticas en todo el país.

A la entrada del centro destaca la bandera multicolor de la comunidad LGBTTQ y en su interior, desde el diseño de los espacios y habitaciones hasta los espectáculos de baile, llevan el sello de orientación a ese sector poblacional. El concepto del hotel ha tenido tan buena aceptación que ya Cuba trabaja en la pronta inauguración de El Telégrafo, un segundo hotel de este tipo localizado en el emblemático Paseo del Prado en La Habana.

“Este específicamente es el primer hotel en el Caribe dirigido para la comunidad LGBTTQ, yo he estado en otros hoteles, en otras islas, donde no te sientes muy cómodo, pero este hotel es genial porque te sientes cómodo, te sientes bienvenido”, explicó a CLARIDAD, Kevin McGrath, un canadiense de 37 años quien visita por primera vez el Gran Muthu Rainbow.

 Aunque está dirigido especialmente a la comunidad LGBTQ, el hotel no es exclusivo para ese sector, de hecho, son frecuentes las parejas heterosexuales que eligen el centro hotelero por “su tranquilidad y su buen servicio”.

“Aquí no se discrimina a nadie”, es la consigna que repiten sus empleados.

“Esta tipología de cliente son clientes muy especiales, que llevan un tratamiento diferenciado para que se sientan como de la casa, en su estabilidad. Acá todos los clientes se tratan por igual, todos los clientes son bienvenidos”, afirmó Arlenis Rodríguez Morales, empleada del hotel desde sus inicios y quien sostiene sentirse cómoda con su trabajo en el lugar.

Si bien a la fecha el Gran Muthu Rainbow apenas cuenta con un 30% de ocupación, sus directivos esperan ir levantando los números en los próximos meses a medida que se vaya normalizando el flujo de visitantes. Según datos de la cadena hotelera, es Canadá el país que más visitantes aporta a sus instalaciones, seguido de algunos países europeos, por lo que el paulatino restablecimiento de las operaciones turísticas en la isla y el avance de la vacunación contra el Sars-Cov-2 a nivel mundial deberían ayudar a levantar los números de turistas alojados en el hotel.

“Hay muchos canadienses que buscan un espacio seguro para venir, especialmente en el Caribe, y es bueno sentirte que eres parte de la comunidad”, añadió McGrath.

Se trata de una apuesta grande la de Cuba por brindar un espacio a la comunidad LGBTTQ, pero que da cuenta de la voluntad del país por avanzar en temas de inclusión y de reconocimiento de todos los sectores de la población. Actualmente, el país también discute a todos los niveles el nuevo proyecto de Código de Familia, con el que se busca dotar de carácter constitucional la unión de parejas del mismo sexo, entre otros aspectos de la sociedad cubana.

 

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