Disminuye cada vez más el presupuesto de la UPR

 

Por Giancarlo Vázquez López/CLARIDAD

gvazquez@claridadpuertorico.com

Representantes del sector docente y estudiantil ante la Junta Universitaria denunciaron, mediante comunicado de prensa, que el presidente de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Jorge Haddock Acevedo, recesó súbitamente la reunión de la Junta Universitaria el pasado 24 de junio, evitando completar la discusión sobre el presupuesto y dejando inconclusa su consideración y aprobación. Ubaldo Córdova, vicepresidente ejecutivo de la UPR, rechazó estas alegaciones y que, por tal razón, el presupuesto de la institución quedara en el limbo.

Según expresan en el comunicado, la propuesta de presupuesto consolidado no es el proyecto de presupuesto final integrado que debe considerar por ley la Junta Universitaria. Aunque fue presentada por Haddock Acevedo y aprobada en la reunión extraordinaria de la Junta Universitaria (JU) el pasado 15 de junio, los representantes señalan que ese mismo día, “El Presidente admitió que era un borrador, puesto que el proyecto de presupuesto de la UPR a presentarse a la Junta de Gobierno para su aprobación final no había sido confeccionado, ya que todavía no se contaba con el Plan Fiscal certificado para la UPR de la Junta de Supervisión Fiscal”.

El Plan Fiscal 2020 para la UPR (Plan Fiscal), fue certificado el viernes 12 junio por la Junta de Control Fiscal y presentado el martes 16. Como parte de sus disposiciones, dicho plan pospone los aumentos en la matrícula, reducciones en transferencias de fondos del Gobierno y aumentos de cuota. También establece respaldo a fondos de becas, los programas de ingresos requeridos y la reforma del sistema de retiro para evitar insolvencia en el fondo de pensiones.

Según el Artículo 6.D.(4), la Ley Universitaria indica que corresponde a la Junta Universitaria “Considerar el proyecto de presupuesto integrado para el Sistema universitario según haya sido formulado por el Presidente de la Universidad para ser sometido a la Junta de Gobierno y formular recomendaciones que juzgue pertinentes”.

En cambio, el Vicepresidente ejecutivo de la UPR sostuvo mediante comunicación escrita que el proceso se ha realizado conforme a la reglamentación y gobernanza universitaria; que antes de ser aprobado, el presupuesto fue ampliamente discutido en la JU y que Haddock Acevedo dejó claro que podría tener enmiendas debido a que la JCF no había remitido el Plan Fiscal y la proyección de ingresos.

Córdova dijo que durante la reunión celebrada el pasado 15 de junio, el Comité de Presupuesto de la JU tuvo la oportunidad de presentar un informe con recomendaciones ante el organismo, compuesto por representantes estudiantiles y del claustro, así como miembros de la administración. Además indicó que en dicha reunión la mayoría de los miembros de la JU avaló la propuesta de presupuesto presentada por el presidente con una votación 18-14.

Por otra parte, en la reunión del 24 de junio, miembros estudiantiles y docentes cuestionaron los conflictos en la aportación patronal al Plan Médicode los empleados y las aportaciones confusas al Edificio de Ciencia Moleculares, entre otros puntos en el proyecto de presupuesto presentado por el Presidente de la UPR.

“Mientras se reduce el presupuesto a varios recintos, se aumenta el gasto de la Administración Central al crear varias instancias para ampliar los poderes de la oficina del Presidente. Igual práctica ocurre a nivel de los recintos con la excusa de una supuesta eficiencia institucional”, según en el comunicado publicado ese mismo día, 24 de junio.

Roberto Guzmán, representante estudiantil, y Jorge L. Colón, representante claustral, ambos del Recinto de Río Piedras, señalaron que en la presentación del presupuesto no quedó evidenciada la distribución de fondos para fomentar proyectos académicos, de investigación, sabáticas, descargas para redacción de propuestas y servicios comunitarios, fondos para publicaciones, mentorías para estudiantes, entre otras, todos dirigidos para reforzar los servicios académicos a los estudiantes y a la comunidad.

La semana pasada, Ángel Rodríguez Rivera, presidente de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), cuestionaba en entrevista con CLARIDAD el que el Plan Fiscal reitera el allegar fondos externos a la Universidad, pero, en cambio, no hay fondos para invertir en investigación, que sería una manera obtener más fondos. La ausencia de fondos y la falta de evidencia en cuanto a su distribución, según lo que señalan los sectores estudiantiles, contradicen las exigencias de la JCF y el plan de transformación institucional en ruta hacia una supuesta eficiencia.

“Llevamos un año desarrollando, directamente con los recintos y unidades, un nuevo modelo de presupuesto que incorpora los principios del presupuesto base cero y persigue incentivar la generación de ingresos, el aumento del número de estudiantes y ahorros en los recintos y unidades del sistema universitario. Es preocupante la desinformación que provocan personas desde posiciones de liderazgo. Confunden a la comunidad y al pueblo y laceran la reputación de la universidad. Logramos presentar un presupuesto que considera las necesidades de los estudiantes ante el impacto del COVID-19, por lo que no se incluyen aumentos en los costos de matrícula y cuotas”, puntualizó Córdova.

La Administración Central ha condicionado la aportación presupuestaria a los recintos a la búsqueda de nuevas fuentes de recursos externos sin invertir en recursos para lograr aumentar los fondos propios. Los recintos han tenido que recurrir a redistribuir el presupuesto menguado asignado y buscar ahorros.

Mientras tanto, en el presupuesto se incluyen aportaciones del Fondo General para financiamiento de la Oficina de Transformación Institucional (OTI), una oficina impuesta por la Junta de Supervisión Fiscal que crea una estructura administrativa paralela sobre la ya establecida en los recintos. OTI ha contratado a compañías externas tales como Bluhaus Capital, LLC, para llevar a cabo una reestructuración académica-administrativa y presupuestaria, cuando ya hay oficinas en la Administración Central con esas mismas encomiendas.

Guzmán y Colón destacan en el comunicado que los rectores habían presentado un presupuesto preliminar basado en una aportación presupuestaria asignada desde Administración Central sin conocer las premisas y la fórmula utilizada para calcularla. El 24 de junio, se revelaron cuáles eran las premisas mediante las cuales se distribuye el presupuesto entre los recintos.

 

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