Distanciamiento físico, no social

 

Por Cándida Cotto/CLARIDAD

ccotto@claridadpuertorico.com

Así como expertos en la salud admiten que los contagios con el coronavirus continuaran aumentando, dos expertos en la conducta entrevistados por CLARIDAD previenen que los actos o episodios de violencia también irán en aumento. 

Cuando hay situaciones de desastres tales como huracanes y terremotos como los que ha sufrido el país, en las primeras semanas bajan los niveles de violencia social y de delitos. Algunos, porque no se reportan, otros, porque la gente está envuelta en la acción solidaria.    

El profesor de criminología, Gary Gutiérrez, considera que una de las principales razones para delinquir es la exclusión social. Al igual que con María y los terremotos, ya pasados los primeros 15 días empieza a dispararse la violencia. En este momento estamos viendo cómo la violencia intrafamiliar y de género va en aumento. 

A Gutiérrez le preocupa la orden ejecutiva que impone el toque de queda y el confinamiento de los ciudadanos en sus casas. La orden ejecutiva que establecía una cuarentena hasta el 31 de marzo ahora fue extendida hasta el 12 de abril y el horario del toque de queda se amplió de 7:00 pm a 5:00 am. 

A su juicio, hay que examinar a qué es que se le llama criminalidad, porque generalmente considera criminalidad lo que parte de la violencia, sobre todo, los asesinatos. En el caso de atención a la pandemia dijo que su apreciación es se que están tomando unas medidas para manejar esta crisis desde la represión y no desde el salubrsmo. Es evidente que habrá más sectores que se sientan excluidos y que entre esos sectores va a haber gente que se va a criminalizar para mantener el estándar de vida que tenían. La creación de un nuevo delito —la violación del toque de queda— conlleva un aumento en conducta delictiva. 

“Me parece que la forma en que se está manejando este asunto desde la represión y no desde la educación va a crear sinsabores en algunos sectores porque también es una forma, una visión, muy clasista en el sentido de que te quedas en tu casa. Hay gente que no se puede quedar dos días en su casa porque no tiene qué comer y gente que no está trabajando, que no va a recibir el dinero de ayuda porque no pagaba impuestos o el que sobrevivía día a día haciendo chiripas que está ahora totalmente excluido del proceso. Y ahora a ellos es muy cómodo decirles quédate en tu casa. Bueno, quédate en tu casa si tienes la nevera llena, la cuenta para usar la ATH”.

Ante estos señalamientos argumenta que el distanciamiento tiene que ser físico, no puede ser social, por lo que recabó al Estado que entienda que es absurdo y abusivo intervenir con una persona que vende verduras porque no tenga las medidas de seguridad. En esos casos, la tarea debe ser orientación y explicación, pero no de cerrarle el quiosco.  Advirtió de  que el arresto de personas por violar el toque de queda más bien lo que puede hacer es extender la cadena de contagio. “Si tú pones a miembros de la policía a manejar una emergencia, vas a asignar gente a detener a una persona en la calle, que está poniendo en riesgo a los demás, vas a poner en peligro a los guardias en el carro, en el cuartel, a los empleados del tribunal si la persona está contaminada. Entonces ¿cuál es el propósito de evitar el contagio? Lo más fácil es decirle que se vaya a su casa”. 

Gutiérrez defendió que si algo probaron las comunidades pobres en el país cuando el huracán y los terremotos fue que ellos se saben resolver sin necesidad de policías “En ese sentido lo que me preocupa es que se dispare la violencia porque el Estado está administrando la situación desde lo que llama Carlos Rivera Lugo, la racionalidad adversativa de nosotros contra ustedes y ustedes contra nosotros. Es obvio que si se pone en esos términos va a explotar violencia”. 

El profesor de criminología reconoce que desde el punto de vista médico la cuarentena hace falta. Pero también expone que hace falta la educación y las pruebas: “Una cuarentena sin prueba científica es tiranía; una tiranía de me quedo en mi casa sin saber lo que está pasando en el País”.

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