Mi gente,
Como por ahí viene el 8 de marzo y estaré ausente por unos días, quiero enviarles una décima que mi padre escribió y a quien convencí para que la incluyera en mi primer libro. Se la envío como un regalo de mi padre a la mujer puertorriqueña.
Mujer puertorriqueña*
Sí, hijo, la mujer puertorriqueña
tiene belleza y ternura,
es como las aguas puras
que da la naturaleza.
Tiene blanca su conciencia
y un corazón abnegado,
ellas por su ser amado
dan el alma en su defensa
y cuando aman la Independencia,
son firmes en todo grado.
Empecemos por Mariana,
que allá en el sesenta y tres
fue con los hombres pie a pie,
como mujer espartana.
Fue por valles y montañas
predicando rebelión,
elevando en alto el pendón
que ella misma elaboró,
con Eduviges de Cos,
también digna de mención.
Brígida Beauchamp, quien fue
patriota allá en Las Marías,
servía a los hombres de guía,
llena de grandeza y fe.
Le siguió un poco después
la inmensa Lola de Tío,
la que a América llevó
el grito de nuestra Patria,
que retumbó allá en La Habana
con Cuba y Puerto Rico son.
Blanca y Lolita Lebrón
son grandes por excelencia,
ellas por la Independencia
han dado alma y corazón.
Han luchado con tesón
Isabel y Carmín Pérez,
Juanita y mil más mujeres,
entre ellas la Torresola,
la que en su vida atesora
la Patria con sus vergeles.
Rafael Cancel Rodríguez, 23 de agosto de 1966
*Décima musicalizada por Flora Santiago y el grupo Taoné