«Las estadísticas no eran correctas porque el sistema no las provee»

 

Por Cándida Cotto/CLARIDAD

ccotto@claridadpuertorico.com

Puerto Rico va a ser diferente por los próximos seis o siete meses, cuidado si por un año, hasta que haya una vacuna contra el coronavirus. La pretendida reapertura de la actividad económica no debe eximir de mantener el distanciamiento físico, de guardar la cuarentena, del uso de mascarillas y  de lavarse las manos con frecuencia. Esa es la apreciación de tres médicos integrantes del proyecto de la Asociación IPAS (Asociación de Servicios Primarios), entrevistados en el establecimiento de carpas para hacer las pruebas rápidas de COVID-19.

El doctor Javier Morales, especialista en infectología, quien elaboró el protocolo clínico para el proyecto, explicó que al ver la experiencia de Italia, que de tener un viernes cinco pacientes, el domingo tenía 154,  indica que el virus aparentemente mutó. El virus que estaba en China, en Wuhan, no es la misma cepa que estaba en Italia ni en Nueva York. “Este virus que cogió a Italia es uno más agresivo en el sentido de contagioso. No es que sea más severo en la enfermedad; pero sí es mucho más contagioso que el que estaba en Wuhan”. En el caso de Puerto Rico, entiende que la cuarentena fue efectiva y la decisión correcta.  Lo que ahora sí se necesita es una educación agresiva para mantener la distancia y poder abrir poco a poco la actividad económica.

No obstante, pese a que señaló que se podría estar llegando al pico de los contagios en las próximas dos semanas, una conjetura es que los casos aumentarán cuando se empiece abrir y la gente baje la guardia. “Lo que me preocupa es que la gente no guarde distancia y no respete cuando esto comience a abrir. A lo del pico no le doy tanta importancia. Estoy enfocado en cuando se empiece abrir, qué va a ocurrir.  Entiendo que la economía tiene que abrirse porque si no, de aquí a un tiempo no va a haber comida, el dinero no va a valer nada; pero hay que usar la mascarilla”.

A preguntas de CLARIDAD sobre su apreciación respecto al rastreo de pacientes que está haciendo el Departamento de Salud (DS), la que ha recibido duras críticas de parte de otros colegas, el  doctor Morales expresó que en el Departamento no  había un equipo epidemiológico para enfrentar este monstruo; que entendía que el nuevo secretario, Lorenzo Feliciano, “tiene las mejores intenciones del mundo, pero entiendo que hay que darle espacio para que trabaje. Las estadísticas no eran correctas porque el sistema no las provee. Hay muchas cosas internas que estoy seguro se están bregando. Hay que darle un espacio razonable para que engrane”.

Por su parte, los doctores Ángel Muntaner y Jorge Hess reafirmaron la necesidad de continuar con las medidas de distanciamiento.  El doctor Montaner considera que el distanciamiento y la cuarentena son dos medidas positivas que se han implantado en Puerto Rico. Agregó que ahora que han pasado entre tres a cuatro meses de la epidemia en Japón y China, se sabe que es probable que el virus estuviera allí mucho antes de diciembre y se ha descubierto que hay variantes del virus que dependiendo su carga genética y la carga genética de cada individuo es cómo la persona responde. “Ahora sabemos que hay otros síntomas y cuadros paralelos al COVID, que a lo mejor, y dentro de la crisis de la pandemia, los médicos estaban en guerra y no les daba tiempo a ir a los detalles clínicos”.  Eso está sucediendo, dijo. Ahora en Nueva York se está descubriendo que los cuadros clínicos pueden dar detalles de qué es lo que está pasando con la sintomatología, cuáles son los cuadros genéticos y  por qué alguna gente sí se contagia y otra gente no.

“Por eso es por lo que tenemos que mantener lo que hemos hecho hasta ahora y tener paciencia balanceando la vida humana versus lo económico. Todos sabemos que hay que volver a la actividad económica porque hemos estado en quiebra en los pasados años, pero cuando vis a vis vemos lo que ha pasado en España, Italia e Inglaterra, que va a terminar como el país con más muertos…”.

Respecto al proyecto de la Asociación IPAS, estas ya tienen 26 carpas. Las más recientes se montaron en Ponce y Vieques. El doctor Montaner reconoció que el nuevo secretario, “aun bajo toda la presión que tiene” ha continuado colaborando con el proyecto, suministrando las pruebas para que puedan seguirse dando los servicios. Además, han recibido la colaboración de las aseguradoras Triple M y First Medical y del Programa Menonita. Expresó que están  en espera de que otras entidades  se unan en el esfuerzo en estos momentos con aportaciones económicas para poder cumplir con todo el andamiaje y el equipo que conlleva tener las 26 carpas. “Creo que estamos rondando los $170 mil en gastos hasta el día de hoy”.

El galeno mencionó que la acogida del público ha sido sumamente positiva. A los primeros que se les hizo las pruebas fue a la Policía, los Bomberos y a personal de salud de primera línea: enfermeras, doctores y técnicos. En la carpa localizada en el Colegio de Médicos, hasta el momento, se han hecho mil pruebas.

“El público de a pie, los ciudadanos de nuestro pueblo, han acudido a las carpas tengan o no tengan plan”. Otros escenarios en donde se han hecho pruebas son en centros de envejecientes y hasta en negocios.

“En la medida en que el Gobierno ha puesto de manifiesto las diferentes fases de apertura, más gente se ha preocupado por tratar de hacerse la prueba. Estoy recibiendo montones de llamadas para poder hacer la orden médica. Yo creo que hay una concientización, un despertar, de identificar dónde se están haciendo las pruebas”.

En tanto, el presidente de la Asociación IPAS explicó que la aplicación de la prueba funciona en la modalidad servicarro. La persona llega en su auto, se identifica, se le toman sus datos y pasa a la carpa; entonces, presenta su mano, se le da un pinchazo en el dedo y en 15 minutos se tiene el resultado. Diariamente, los resultados se envían a las oficinas epidemiológicas regionales del Departamento de Salud,  aunque desde hace una semana  los resultados también se están enviando a un videoportal creado por el Departamento.

En cuanto a los resultados, el doctor Hess afirmó que han tenido resultados positivos, que se han repetido resultados negativos, que han tenido que volver hacer pruebas moleculares y se han corroborado resultados. Hasta la segunda semana de mayo, se habían realizado unas 5 a 6 mil pruebas en las diferentes carpas y de esas un 6 a 7 % han salido positivos. A esos pacientes que han salido positivos también les hacen rastreos de seguimiento. A todos  se les llama, incluso a los negativos, porque “el que salga negativo no es que ya puede salir a los kioskos de Piñones, todavía se debe mantener el distanciamiento definitivo.  Todavía esto no nos da una licencia para estar en la calle. Puerto Rico va a ser diferente por los próximos seis a siete meses y, cuidado si un año, hasta que haya la vacuna que pueda surgir”, dijo enfático.

Ahora el proyecto ha entrado a una segunda fase de rastreo en el cual los casos positivos son referidos al doctor Fernando Cabanillas y al doctor Morales, quienes están desarrollando un estudio científico. Ambos galenos sostuvieron que es importante que se continúen ofreciendo las pruebas de manera gratuita, tanto por el proyecto de los IPAS, como de otros grupos de salud y laboratorios, ya que hay muchas personas que en estos momentos no pueden pagar porque están desempleados o porque no tienen plan médico.

Para finalizar, el doctor Montaner anunció que cualquier colaboración con la AIPA es bienvenida. “La única aportación del Gobierno es la de las pruebas. Esperamos que otras compañías nos puedan apoyar”.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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