Lolita: Monólogo celebrando el centenario de una heroína puertorriqueña

Hostos Community College, CUNY. 19 de septiembre de 2019.

Miguel Juan Concepción Blanco/Especial para En Rojo

La sala de teatro del Colegio Comunitario Eugenio María de Hostos en el sur del Bronx, Ciudad de Nueva York fue testigo de la importante y necesaria  presencia de una de las grandes heroínas puertorriqueñas por la independencia patria. Dolores Lebrón Sotomayor, de Lares Puerto Rico, mejor conocida como Lolita Lebrón,  líder del asalto al Congreso USA, el 1ro de marzo de 1954, reclamando la libertad de Puerto Rico, mandando así al mundo entero un claro mensaje de que Puerto Rico seguía siendo una colonia de los Estados Unidos de Norte América y que el proclamado acuerdo entre Puerto Rico y USA de ser un Estado Libre Asociado era un engaño. Lolita, quien junto a Rafael Cáncel Miranda, Irving Flores Rodríguez y Andrés Figueroa Cordero, formaron el comando nacionalista que cumplió con los deberes patrios pro independencia. La presentación comienza con un escenario al descubierto en donde vemos un semi círculo formado por cubículos que van de centro derecha a izquierda uniéndose en el fondo centro con un pequeño escritorio con silla. En el  segundo cubículo de izquierda centro del escenario se observa un crucifijo y una pequeña virgen María. Dos pedazos de tela blanca están doblados a cada extremo del centro  del escenario. En izquierda centro una guitarra descansa en un estandarte.  Un apagón general da comienzo a la introducción de la puesta con un corto documental  de testimonios de algunas personas que conocieron a Lolita, así como también extractos verídicos de la prensa estadounidense sobre el acontecimiento.  En el documental vemos como los combatientes hermanos Claudio dan testimonio de como Lolita fue inspiración y motivo para ellos también dedicar sus vidas a la causa por la independencia patria. Otros testimonios como los de la hermana de Lolita y amistades confirman la entrega sincera de Lolita a la lucha por la independencia patria que junto a su buen gusto en el vestir distingue a esta heroína nacional puertorriqueña.

Acabado el corto documental, las cortinas del fondo cierran y aparece humo en el escenario. La luz de izquierda fondo se ilumina para alumbrar la entrada de Lolita, que en ropa de presidaria, pantalón y camisa crema, nos establece la celda que se convierte en todo el escenario. Cada cubículo es una estación que expresa el sentir de Lolita en cuanto a lo cometido y sus relaciones familiares. A su vez, aparece otro personaje mujer que realiza varias funciones en escena tales como: la guitarrista y cantante, otra presidaria y una vez más como acompañante musical en el toque de Bomba con una caja de madera. Cada área en donde se ubican los cubículos enmarcan una parte del discursivo estilo del monologo que desde el principio establece al público directamente como recipiente del mensaje de libertad patria y el sacrificio de entregar la vida por la misma. Luego de revelarnos la fe Católica de Lolita, su fervorosa creencia en la misión de independencia patria y ser un número más dentro de la cárcel en donde nos enteramos de las torturas de rayos laser a las cuales fue sometida Lolita, junto a las acostumbradas palizas de parte de las guardias penales. Su invencible espíritu de lucha es el tema principal siendo el objetivo de la pieza de homenajear y dar a conocer a esta insigne patriota que vence y triunfa frente a la injusticia imperialista. Es así como  la acción nos lleva a la imagen icono de la mujer puertorriqueña que elegantemente vestida embiste al enemigo de su país. Vemos a Lolita como se cambia el uniforme de presidaria para vestir el ya famoso traje sastre que semeja un uniforme militar. Después de vestida con su traje icono Lolita se dispone a recrear una tarima en el centro fondo del escenario. Siguiendo el parlamento va formando esa tarima utilizando las telas que descansaban a los extremos del escenario y que en cada una estaban escritos los nombres de otros y otras patriotas que fueron encarcelados por nuestra independencia patria, entre ellos Oscar López, así como también el del Maestro Don Pedro Albizu Campos y el del poeta nacional Comandante Juan Antonio Corretjer. Estas telas se unen al espaldar de la silla en centro fondo la cual la actriz utiliza para treparse y dejar caer de sus manos otra tela larga esta vez descubriendo la bandera de Puerto Rico.

Viviana Torres Mestey, como Lolita así como también autora del texto, imparte al personaje la fuerza y el coraje que describe a la heroína. Su estatura alta y esbelta facilita la verosimilitud del personaje en escena. Con una controlada concentración que le dio a su actuación veracidad, demostrada acertadamente en los movimientos y  las pausas que contribuyeron en presentar una mujer convencida de sus acciones, esto permitió un buen manejó de los diferentes momentos emocionales que el personaje medita en los diferentes roles que tuvo en la vida.  En esta pieza el tema político, que siempre es un reto creativo tanto para el escritor así como también para el director en el manejo del inevitable panfleto, es tratado desde el naturalismo que sigue un patrón simple de montaje en donde la imagen y el significado de la misma cumplen con encarnar el personaje político y humano para que sea conocido y homenajeado. Enmarcado en el espacio de la cárcel realza el sacrificio de esos momentos de la prisionera en donde la acción se presenta en ese marco limitado llevándole al desarrollo del personaje épico que se hace importante por el acierto de esa acción de coraje, valentía y resistencia.

La dirección a cargo de Efraín Rosa, nos describe el ambiente real de esa celda y a la vez ese ambiente mental que refleja el personaje en donde el verdadero compromiso personal de la protagonista se demuestra por un montaje que utiliza todo el espacio escénico para dividir los diferentes estados emocionales que se cristalizan en las áreas demarcadas por los cubículos. Esto puede ocasionar que en algunas presentaciones, como ocurrió en la que presenciamos, el ritmo de la misma se torne lento por las largas pausas y transiciones. Este concepto naturalista de esos estados emocionales y de pensamiento crítico en donde el personaje define y defiende su objetivo desde la celda, para en retrospección llegar al momento épico del asalto al congreso en donde Lolita en las gradas del salón principal del congreso estadounidense saca la bandera y  la pistola que dirigida al techo del hemiciclo dispara con el grito de ¡Viva Puerto Rico Libre! Free Puerto Rico! Este hecho sella el momento de una mujer que vestida a la moda expone con elegancia una lucha justa. Es por esto que tanto el vestido como el lápiz labial rojo junto a la cartera adquieren un simbolismo que presenta otro estilo de la mujer puertorriqueña revolucionaria dentro del estereotipo de la belleza y el glamour que sigue la moda dentro de esos cánones de belleza consumista, que además seguían tiempos de códigos de vestimenta conservadora. Esto acompañado de elementos de distanciamiento brechtiano en donde las escenas con música acompañada de la joven actriz enriquecen la propuesta creativa y nos aleja de la catarsis que pueda provocar las situaciones de infortunio para enfocarnos en esa actitud de triunfo. La producción cumple su cometido con éxito ya que sigue fielmente y citamos del programa de mano el objetivo de la misma: “Lolita” es una reflexión crítica sobre los sucesos que ocurrieron en esa primavera de 1954 y las motivaciones que tuvo, junto al grupo de otros tres nacionalistas, para ir a ofrecer su vida por la causa de la independencia”. Su gesta quedó definida en la frase que justifica su acto: “Yo no vine a matar a nadie, yo vine a morir por Puerto Rico”.

Agradecemos inmensamente por traernos tan necesaria e importante presentación a la profesora Ana López y su Club de estudiantes puertorriqueños del Colegio Comunitario Eugenio María de Hostos, CUNY, al Teatro Repertorio de Hostos, al Departamento de Humanidades del Colegio, al grupo Las Lolitas de NYC- junte de mujeres puertorriqueñas que se han dado la encomienda de celebrar el centenario del  nacimiento de Lolita- y a El Frente Independentista Boricua.

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