Mi vida según Guillermina Mulero

 

Por Manuel de J. González/CLARIDAD

Según mi carpeta creada en la División de Inteligencia de la Policía puertorriqueña, en todos los lugares donde viví a partir de 1966 hubo al menos un vecino o vecina reclutado por los guardias que les informaba todo lo que veía. Una de las primeras reclutadas es una tal Guillermina Mulero, vecina de la calle Madrid en Río Piedras.

Dice uno de los primeros memorandos del dosier policiaco: “6:30 PM: Fue entrevistada Sra. Guillermina Mulero residente en calle Madrid #996 quien informó conoce al vigilado como un individuo de ideales independentistas que lleva un año estudiando leyes en la U.P.R. que el vigilado no es visitado por otros líderes independentistas. Informó también que el vigilado posee un auto Rambler digo Volkswagen lic 566-495. Que estará más pendiente del vigilado y que está dispuesta a cooperar.” El memorado es de 1967 cuando no había concluido el bachillerato ni tenía automóvil, pero a pesar de esos errores la “cooperadora” promete.

A partir de ese momento los informes fueron casi diarios y quisiera pensar que a veces intencionalmente engañaba a los vigilantes inventándose historias que los despistaban. En un informe fechado 30 junio de 1967 se le cita informando “que el vigilado casi no sale de residencia, no trabaja, ni estudia y cuando sale lo ha visto acompañado de su padre. También lo ha visto salir de su residencia durante la tarde, pero regresa temprano antes de la 9:00 pm… se nota bastante inactivo ya que cuando sale regresa temprano”. Como ven, la imagen trasmitida por Guillermina es de un muchacho que apenas abandona la casa y que, cuando sale, lo acompaña su padre.

Esa imagen se refuerza en otro informe de 11 de septiembre realizado, según el guardia que lo escribe, en “cumplimiento de instrucciones relacionadas con el plan de intensificación de vigilancia”. Dice el documento: “Se hizo chequeo de su residencia pero no fue visto. Pero la cooperadora Sra. Mulero informó que él se encontraba en su residencia y que estaba lo más tranquilo en estos días.” En el memorando del 13 de septiembre se añade: “Informó la Sra. Mulero que el vigilado sale a veces con su padre bien temprano por la mañana y regresan temprano en la tarde.”

Entre abril y octubre de 1967 aquel muchacho hogareño que, según Mulero, apenas salía de su casa, realmente estaba viviendo la vida de un cuadro político “entregado” a la lucha patriótica. Mirado desde el siglo XXI el activismo parece alucinante. En abril de aquel año ’67, el muchacho hogareño salía todos los días a sus clases y actividades en la UPR y a reuniones nocturnas relacionadas con la FUPI, de la que era Secretario de Prensa. En la propia carpeta aparecen múltiples de esas reuniones, reportadas por un infiltrado que asistía a todas. Cuando no había reunión se trabajaba en la redacción y confección del boletín “Información Estudiantil”, que se repartía en la mañana siguiente en los portones de acceso al campus. De cada repartición hay constancia en la propia carpeta. Militaba, además, en el organismo local de Río Piedras del MPI, llamado “Misión Hugo Margenat”.  El activismo universitario condujo a mi suspensión sumaria de la UPR a principios de mayo de 1967, cuando apenas me faltaban algunos exámenes finales para graduarme.

Según la carpeta, el activismo durante septiembre, cuando también Guillermina me describía metido en la casa, fue aún mayor. El día 6 los policías me colocan participando en un “sit-in”,organizado por la FUPI, para denunciar nuestras suspensiones. El día 9, otro informe policial me coloca participando en una reunión del MPI en Humacao y después, en la misma carpeta, se reproduce un artículo de mi autoría, en CLARIDAD, reseñando unas prácticas antimotines de la Guardia Nacional en ese pueblo. El 11 participo en una reunión de la FUPI en la noche, resumida en el informe de un infiltrado, y al otro día en los actos para conmemorar el natalicio de Pedro Albizu Campos celebrados en Río Piedras. El 17 de septiembre participo en la asamblea de la Juventud del MPI, celebrada en Ponce, y el 18 vuelvo a estar en una reunión del Comité Ejecutivo de la FUPI, también reportada por un informante de la Policía.

Posterior a aquel septiembre no hubo más aportaciones de la vecina porque dejó de serlo, pero ¿por qué se mantuvo hasta el final describiéndome como muchacho hogareño, que sólo salía de su casa acompañado del padre? Es tentador pensar que quería protegerme. En The life of others, la película alemana premiada con un Oscar en 2006, sobre la persecución de la policía secreta de la Alemania del Este contra algunos escritores considerados opositores, el agente de la Stasi encargado de la vigilancia del protagonista, terminó protegiéndolo. Quisiera pensar lo mismo de mi vecina, aun cuando tal vez, como al agente de la policía secreta alemana, le pagaban para vigilarme. Me la imagino en las rejas de su balcón, conversando diariamente con el policía que se hacía pasar por transeúnte, inventando historias de prisa antes de sentarse a ver la novela de las siete.

Como punto final a estos informes, debo comentar la actuación de otra “cooperadora”, identificada como Liana Pérez Orraca. Esta resulta ser la casera de mis padres, es decir, la propietaria de la vivienda que ellos rentaban. Igual que Guillermina, vecina del #996, y Rafaela Ramírez, quien residía en el #993 (como pueden ver, los del #995 estábamos cercados),la casera también era “cooperadora” de la Policía y, en su caso, hizo algo más que informar. En uno de los memorandos le dice al policía entrevistador que mis padres tenían que mudarse porque ya les comunicó que “había vendido la casa”. Esas “ventas” sirven muy bien a los arrendadores cuando quieren salir de un inquilino problemático. Por decisión de la casera, el #995 de la calle Madrid tenía que ser desalojado y en poco tiempo, mis padres consiguieron otra vivienda donde estuvieron hasta el fin de sus días (viví allí poco tiempo). Hasta donde sé, nunca se enteraron de que, en todo momento, entre su casera y ellos hubo otros interlocutores que conocieron primero de su forzada mudanza.

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