Mueven oficinas del Registro de la Propiedad

Contratiempos en el servicio, pérdida de documentos, ansiedad, renuncias inesperadas, trastoques de la vida familiar, todo esto y más son las consecuencias que están enfrentando primero, las y los investigadores de títulos de propiedad, así como los y las trabajadoras del Registro de la Propiedad (DRP) ante el traslado inesperado de las oficinas de los municipios de Caguas, Carolina, Guaynabo y San Juan, a un viejo edificio localizado en el número 500 de la avenida Roberto H. Tood, parada 18 en Santurce.

Así lo denunciaron a CLARIDAD empleados y usuarios del Registro de la Propiedad que prefieren quedarse en el anonimato por temor a represalias. En el caso de los empleados del Registro de la Propiedad, que está adscrito al Departamento de Justicia (DJ) éstos no tienen el beneficio de la sindicatura. Confidencias de personas de las diversas oficinas coincidieron en denunciar a CLARIDAD que el traslado a Santurce fue uno repentino y no se les ha permitido hacer arreglos para ajustarse ellos y sus familias.

El cambio de estas oficinas tiene repercusiones tanto en los empleados como para los usuarios en general. En el caso del cierre de las dos oficinas de Caguas, éstas daban servicio además a la población de Cayey, Cidra, Aguas Buenas, San Lorenzo, Juncos y Gurabo. En el caso de las tres oficinas cerradas en Carolina, servían además a los pueblos de Trujillo Alto, Canóvanas y Loíza. En tanto la oficina de Guaynabo, así como las cinco de San Juan servían a sus respectivas poblaciones y estaban ubicadas en instalaciones públicas.

Los y las trabajadoras han descrito el proceso como uno “atropellado e insensible”. Frente a la larga distancia que implica para muchos el traslado denunciaron que desde el 2000 no han recibido un aumento de sueldo por lo que el traslado añade gastos de transportación a sus ajustados ingresos. Además de las implicaciones para los que tienen hijos e hijas en edad escolar.

A la ya carga de trabajo que tiene el personal debido a renuncias y/o retiro en años anteriores, en algunas oficinas el cierre ha provocado la renuncia de cerca de 20 personas. Más aun, revelaron que hay empleados que ya cumplieron los 30 años de servicio y ahora con la mudanza no se les permite retirar alegando que son “puestos esenciales”.

En pésimas condiciones el “nuevo” edificio

Por otro lado el edificio -expresaron- no está limpio, los documentos fueron depositados en el sótano por lo que tienen que usar mascarillas para protegerse del polvo y el hongo, e incluso una fuente aseguró que ya ocurrió un primer robo, lo que provocó un descalabro, en particular a los planos de Guaynabo.

Mientras a raíz del anuncio por el DJ del cierre y el traslado de las citadas oficinas se presentó por el senador Aníbal José Torres Torres, -en octubre- una resolución para que la Comisión de Asuntos Internos del Senado hiciera una investigación para conocer la justificación de la acción del DJ la medida se encuentra como suele decirse “dormida” en dicho cuerpo legislativo.

Artículo anteriorMovimiento Cooperativo de Puerto Rico En defensa del Planeta y un sistema financiero justo
Artículo siguienteNotas y comentarios