Nobel de la Paz a la solidaridad internacional de Cuba

 

Por Marcelo Barros/ Especial para En Rojo

Este domingo, 26 de julio, los ciudadanos y ciudadanas de Cuba recuerdan el intento de los jóvenes revolucionarios de tomar el cuartel Moncada en 1953. Este evento dio el más fuerte impulso ala revolución cubana que triunfó en 1959. Desde entonces, el pueblo de Cuba resiste heroicamente a toda la guerra armada por el imperio de los Estados Unidos en contra el primero territorio libre de las Américas.

En este año, celebramos este aniversario apoyando y divulgando la campaña internacional para que sea otorgado el Nobel de la Paz de 2021 para las Brigadas Médicas Cubanas Henry Reeve.

En este momento en lo cual la parte más sana de la humanidad propone nueva organización social y económica para el mundo pospandemia, es muy oportuna y necesaria esta iniciativa internacional de condecorar profesionales del Contingente Henry Reeve que actúan contra COVID-19 en diferentes países. Cuando las grandes potencias del mundo y la mayoría de los países han cerrado las fronteras y pensado solo en sus intereses internos, Cuba dio al mundo el más grande ejemplo de solidaridad internacional. En medio de la pandemia del nuevo coronavirus, 1.800 profesionales de las brigadas cubanas del Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias Henry Reeve, atienden víctimas de la COVID-19 en Venezuela, Nicaragua, Surinam, Jamaica, Haití, Italia, España, entre otras naciones. Son 21 grupos esparcidos en diversos continentes. En 2007, el Contingente Henry Reeve ya recibió el Premio Doctor Lee Jong-Wook de Salud Pública, entregado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La iniciativa de proponer esto premio fue lanzada por la organización francesa Cuba Linda y por el Comité Francia-Cuba y ya está en diversos países del mundo. El Nobel de la Paz sería signo importante del reconocimiento mundial no solo de los médicos, sino de todo un país educado ala solidaridad internacional. Es importante apoyar esta campaña por motivos sociales y políticos. Sin embargo, también se hace importante insistir en que la verdadera espiritualidad va más allá de la religión. Consiste en el cuidado con la sacralidad de la vida nuestra, de los otros y la vida presente en todo el universo. Será nuestra capacidad de ser solidarios/as que revelará quien es del Espíritu y quien no lo es. En el Nuevo Testamento, la 1ª carta de Juan afirma: “Dios es amor. Quien vive el amor (solidaridad) vive en Dios y Dios vive en esta persona” (1 Jn 4, 16). Los primeros cristianos afirmaban: “Nosotros somos aquellos que creemos en el amor solidario”.

El autor es monje bendictino y ha escrito más de 40 libros.

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