CLARIDAD
En un editorial publicado electrónicamente la semana pasada, el colectivo de Diálogo, periódico oficial de la Universidad de Puerto Rico (UPR), le cuestionaba a la administración universitaria los argumentos que ofreció para justificar el anuncio de un nuevo recorte al periódico para el próximo año fiscal –el cual disminuiría su presupuesto en un 60 por ciento– y del establecimiento de otro modelo organizacional para esta plataforma de comunicación como parte de los intentos de generar ahorros ante los recortes presupuestarios que enfrenta el sistema UPR.
“En Diálogo, donde se han cubierto de cerca los cambios y desafíos que enfrenta el principal centro docente del país, no estamos faltos de conocimiento sobre los retos financieros que enfrenta la UPR. No obstante, más que un tema de cifras y números, nos preocupan las verdaderas intenciones que puedan mediar en esta determinación”, manifestó el colectivo sobre la disminución presupuestaria.
“Diálogo responde a los lineamientos periodísticos fundamentales, en los que predominan la verdad, la razón, la imparcialidad y la justicia. El problema, entre muchos, es que la verdad siempre incomoda a diversos sectores, sobre todo los que tienen en sus manos el poder de mover las cosas a su antojo y oprimir”, continúa esbozando el editorial.
Y es que, más allá de las proyecciones de la administración, el colectivo de Diálogo vislumbra que la llamada restructuración del medio universitario es “un operativo institucional de censura hacia la fiscalización universitaria y violación a la libertad de prensa” debido a que ha sido plataforma para el análisis crítico y el debate de los asuntos de mayor relevancia en el país.
En el editorial se hizo un llamado a recordar los intentos de censura que ha sufrido Diálogo en sus 31 años de trayectoria, así como las amenazas a su independencia editorial y gestión fiscalizadora. El último intento se dio hace escasamente unos meses, cuando se pretendía despedir a su director Víctor Rodríguez tras la publicación de varios artículos que cuestionaban la gestión del actual presidente interino de la Universidad, Darrel Hillman Barrera.
La publicación de mencionado editorial se efectuó al día siguiente de que un grupo de periodistas y escritores – muchos(as) de los que comenzaron su carrera en Diálogo como estudiantes practicantes – se presentara frente a la emblemática torre del recinto riopedrense en un acto de solidaridad con el proyecto y de denuncia contra las movidas administrativas.
Con el recorte del 60 por ciento al presupuesto de Diálogo, solamente se podría costear la nómina de las dos plazas con las que cuenta el proyecto, dejando fuera los empleados por contrato que conforman la plantilla. Según supo el medio, el borrador de presupuesto para el año fiscal 2018-2019, que al momento elabora administración central, reduce a unos $109 mil el presupuesto operacional de este medio, una diferencia de sobre 60 por ciento con respecto a los $282,248 que se asignaron durante el vigente año fiscal.
Los planes de disminución de presupuesto son más significativos considerando que para el año 2017-2018 el periódico ya había sufrido un recorte de 28 por ciento, el cual limitó dramáticamente los recursos con los que contaba para realizar su labor como medio oficial de la institución.
Sobre la reorganización del periódico anunciada por Hillman, los portavoces de la concentración realizada frente a la torre dijeron que esta movida no fue consultada con la dirección del medio ni con los directores de los principales programas de comunicación del sistema UPR a los que pasaría a estar adscrito Diálogo. Actualmente, este medio es una entidad adscrita a Servicios y Actividades del Sistema Universitario (SASU).
Denunciaron, además, que ni el presidente interino ni la Junta de Gobierno han querido reunirse con los miembros de Diálogo en aras de considerar su insumo a la hora de diseñar un presupuesto justo y que contemple lo necesario para que el medio pueda continuar operando. Esto, a pesar de reiterados intentos de comunicación por parte de Diálogo y de la entrega que le hicieran a la administración de seis ideas para allegar fondos externos y generar ingresos propios.
“La administración universitaria cerrará una institución que es emblemática de la misión de la Universidad porque en Diálogo se dan los tres objetivos: educación, investigación y servicio”, dijo durante la manifestación Odalys Rivera, editora del periódico y quien ha visto pasar por el proyecto a decenas de estudiantes practicantes.
Precisamente, Diálogo ha sido taller para innumerables periodistas y escritores de excelencia en Puerto Rico. Además, “el proyecto ha provisto a varias generaciones de periodistas la oportunidad de prepararse adecuadamente para laborar en los medios principales de este país, así como para ser admitidos en prestigiosos y competitivos programas graduados en Latinoamérica, Europa y Estados Unidos continental”, como menciona la declaración leída frente a la torre.
“El recorte de presupuesto proyectado para Diálogo deja en un limbo económico al periódico. Sin la posibilidad de costear los gastos de operación, la administración universitaria prácticamente clausura un medio de comunicación valioso, y deja sin taller de trabajo y práctica a profesionales de la comunicación y a los sobre 20 estudiantes por año que escogen al periódico como centro de práctica”, lee el editorial.
Las personas solidarias con el proyecto exigen que la administración y la Junta de Gobierno den un paso atrás en sus planes nocivos contra Diálogo, además que se tome en cuenta la opinión de quienes trabajan el proyecto.
“Cualquier universidad que se respeta a sí misma necesita una publicación que sea fiscalizadora y que cuestione. Eso es señal de madurez y de tolerancia. En las circunstancias en que se encuentra el país y la Universidad, Diálogo es más necesario que nunca”, según dijo el fotoperiodista Ricardo Alcaraz, quien laboró 31 años en el periódico universitario.
