Universidad de Puerto Rico : Un contrato cuestionado y un jefe de informática dudoso

 

 

Por Redacción de CLARIDAD

La reciente decisión de la administración de la Universidad de Puerto Rico (UPR) de cambiar su plataforma informática y migrar de Google a Microsoft el contenido de la red informativa de la institución, incluyendo los correos electrónicos de los integrantes del sistema, ha causado un gran revuelo y levantado serias interrogantes. El acuerdo ha sido denunciado como innecesario por la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), que agrupa al personal docente, y por otros sectores universitarios afectados por un cambio atropellado e inconsulto que ha provocado confusión y representado numerosas instancias de información perdida, incluyendo datos y correspondencia relevantes a los cursos y programas académicos.

¿Qué pasa con este contrato que ha provocado un cuestionamiento tan fuerte? Primero, que terminará costándole $3.2 millones a la UPR, en un momento muy sensitivo y de gran fragilidad financiera en la institución. Segundo, porque el descartado servicio de Google gozaba de buena aceptación entre sus usuarios y no tenía costo para la UPR.  Tercero, porque durante este cuatrienio, y de la mano de importantes cabilderos asociados al gobernante Partido Nuevo Progresista (PNP) y la administración gubernamental de turno, Microsoft Caribe  ha ido poco a poco acaparando los  contratos más jugosos de servicios de sistemas de información en las diversas agencias e instrumentalidades del Gobierno de Puerto Rico.

Pero hay una cuarta razón tras el cuestionamiento a la decisión de migrar la plataforma informática de la UPR hacia Microsoft, y esta tiene que ver con quién es el encargado de implantar dicho proceso y velar por su eficiencia y debido cumplimiento. Se trata del actual Principal Oficial de Informática de la UPR, Ernesto “Ernie” Pujols, un individuo de cuestionables credenciales académicas y profesionales, lo que levanta dudas sobre los criterios bajo los que fue seleccionado para ocupar un puesto tan neurálgico y sensitivo en la administración central del principal sistema de educación universitaria de Puerto Rico.

Quien busque el perfil oficial de este personaje en las redes sociales o profesionales, como FaceBook o Linkedin, probablemente no lo encuentre porque fue borrado. Pero en CLARIDAD lo tenemos y lo vamos a divulgar. Según su perfil en Linkedin, Ernesto Pujols, posee un grado asociado del City College of San Francisco (un “community college” en dicha ciudad del estado de California) y un bachillerato de la Universidad del Este (del sistema Ana G. Méndez en Carolina, Puerto Rico). Su carrera profesional ha transcurrido en el Gobierno de Puerto Rico: en el Capitolio, Agencia para el Manejo de Emergencias y Desastres, Departamento de Educación y, ahora, la UPR, siempre durante gobiernos del PNP.

¿No resulta incongruente y absurdo que la UPR, que en el año 2017 graduó 219 estudiantes de sus distintos programas de bachillerato en áreas de cómputos- y que cada año gradúa más de 100- en sus recintos de Mayagüez, Río Piedras, Arecibo, Bayamón y Humacao, no haya buscado entre sus egresados candidatos o candidatas más competentes y comprometidos que Ernesto Pujols para el puesto de Principal Oficial de Informática?  Y si acaso estos no fuesen suficientes, se habría podido reclutar a uno o una de los 25 graduados de Maestría en Ingeniería de Computadoras o de los 8 Doctorados en CISE (Computer and Information Sciences and Engineering), egresados del Recinto de Mayagüez desde el 2016.

Pero Ernesto Pujols representa un peligro aún mayor para la UPR. Porque además de mediocre y politiquero, es un furibundo activista de la extrema derecha política e ideológica, con el mismo celo persecutorio que caracteriza a dichas bandas neo fascistas. Así consta en su borrada foto del perfil en las redes, donde aparece sonriente junto a un banderín de “Trump 2020” y el que parece ser su lema favorito “Be prepared communist because I´ll be watching you closely.”(“Prepárate comunista porque te estaré velando de cerca.”

Considerando la misión de la Universidad, la diversidad y el libre flujo de ideas que la educación verdaderamente universitaria debe promover, y la naturaleza sensitiva del manejo de cualquier información, ¿es esta la mejor persona en todo Puerto Rico para administrar el sistema de información de la UPR?  Ciertamente, las dudas son más que razonables sobre los criterios que se utilizaron para reclutar al actual jefe de informática. La comunidad universitaria les ha pedido explicaciones a la Junta de Gobierno y al Presidente. El País aguarda por su respuesta.

 

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